Cuando me decís que os gusta mi cosplay traigo a mi amiga y os hacemos un corazón en señal de agradecimiento |
Pero da pereza.
Mucha.
O al menos eso me ocurre a mí cada vez que pienso "va, Becky, deja de criar hongos en la cama y ponte a hacer el cosplay que luego no te da tiempo" y yo misma me respondo "cinco minutos máááás"
A la derecha yo siendo perezosa, a la izquierda mi yo trabajador |
¡Levántate y anda, Lázaro!
Un cosplayer rezando a Son Goku |
El problema será que mi máquina de coser está al fondo en el armario, en la caja del IKEA debajo de varios alfileres y cajitas con cuentas. Y para sacarla parece que tenga el cuarto en obras (pronto se acercarán ancianos a mirar qué ocurre). O quizás es hacer patrones... sí yo creo que son los patrones.
¡Al diablo con ellos!
Desde aquí propongo que se creen expos llamadas "expo-susto". Son expos manga/videojuegos (o lo que os venga en gana) que realmente no se van a celebran nunca
"¿pero para qué, Becky, qué finalidad tienen?"
Os preguntaréis. Pues bien yo os guiaré hacia la luz.
Sirven para que cosplayers perezosos como yo piensen que hay un evento al día siguiente y se animen a hacer el cosplay la noche anterior. ¡Solucionado! Tendrán el cosplay preparado para la siguiente expo que se vaya a celebrar (y está sí que será de verdad, eh). Además si hay algún error podrán corregirlo sin problema y sin falta de tiempo.
Yo lo dejo caer y si alguien se anima que cuente con mi colaboración
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